Bajo la premisa de que Clínica UC está al servicio y la atención de cada paciente, los detalles que dan vida a este proyecto son múltiples. Vajilla francesa, individuales de papel con diseños especiales, servilletas y cubiertos finamente diseñados, además de mermeladas, cremas y endulzantes preparados para “Clínica Gourmet”, son sólo algunos de los elementos que siempre están presentes.
“Junto a las nutricionistas fuimos probando cada una de las minutas y platos destinados a este proyecto. Además, fui el encargado de crear la imagen corporativa de ‘Clínica Gourmet’, desde la vajilla, hasta las servilletas, como un aspecto que también quisimos cuidar mucho” (CVM) .
Publicaciones del Chef en Revista Red Salud.
El menú
Los lácteos y quesos bajos en grasa, además del aceite de oliva, tampoco están ausentes en los platos que consumen quienes, por distintas razones, deben permanecer internos en la clínica. Cada minuta se diseñó pensando en que fuera saludable y especial para cada tipo de paciente. Es decir, que se acomoden a la patología de cada uno y a las necesidades nutricionales de hipertensos, diabéticos o niños, por ejemplo.
Replicar el modelo en casa
“Clínica Gourmet” echa por tierra la creencia de que estar enfermo es sinónimo de comer mal o ingerir solamente “comida para enfermo”. Además de ofrecer la completa variedad de menús, los pacientes que se van con el alta médica pueden acceder a una pauta alimenticia por escrito, que se les entrega con el propósito de poder aplicarlo en sus casas.
Y como la idea es que la clínica completa se vista de mantel largo, la iniciativa también se está implementando para el personal que trabaja en ella. Bajo una mirada saludable, se está potenciando el consumo mayoritario de ensaladas y frutas, con exquisitos aderezos en el menú diario.
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